Si todos fueran veganos disminuiría hasta 75 por ciento el uso a nivel mundial de tierras agrícolas.
Frente a la falta de conocimiento sobre el veganismo, han surgido muchos conceptos erróneos que desacreditan esta forma de vida. Desde un punto de vista nutricional, por ejemplo, se suele decir que la ausencia de carne provoca deficiencias nutricionales, o que la dieta vegana carece de diversidad. Es importante saber que, con un equilibrio adecuado en la dieta, las comidas pueden ser muy variadas y proporcionar todos los nutrientes necesarios para el cuerpo humano.
Lo mismo se aplica a los cosméticos y la ropa. Ser vegano no se trata sólo de eliminar ciertos productos: se trata también de encontrar alternativas para ellos que no tengan un impacto negativo en el mundo animal. Afortunadamente, hay muchas plantas y alimentos naturales óptimos para el consumo humano en nuestro planeta que no provienen de los animales.
En realidad, la mayor dificultad que hay que vencer son los hábitos que hemos adquirido a lo largo de generaciones. Una vez que esta barrera es superada, las propias convicciones pueden ser fácilmente explicadas mientras se lleva un estilo de vida vegano.
Diferencias entre un vegano y un vegetariano
En la sociedad moderna, casi siempre por desconocimiento, es muy frecuente confundir veganos y vegetarianos.
Desde el punto de vista dietético, las principales diferencias son las siguientes:
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Los veganos no comen carne, pescado y tampoco cualquier alimento que derive de la explotación de un animal.
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Los OvoLacto Vegetarianos (la tipología más común) no comen carne ni pescado, pero a diferencia de los veganos sí comen miel, huevos, leche y derivados.
Es importante no confundir veganos y vegetarianos con los flexitarianos. Se identifican como flexitarianas aquellas personas que siguen una dieta mayoritariamente vegana o vegetariana, que pero consuman de vez en cuando carne, pollo o pescado. En la mayoría de los casos, quién opta por el flexitarianismo, lo hace más por motivos de salud que por ética.
Beneficios ambientales del veganismo
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Puesto que la ganadería es una de las actividades que genera más emisiones de gases de efecto invernadero, además de que propicia la deforestación, la contaminación del agua y la contaminación del aire, el disminuir la demanda de esta producción puede ayudar a la reducción de este problema.
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Según las Naciones Unidas, las industrias de la carne, de los huevos y de los productos lácteos son responsables del 65% de las emisiones de óxido nitroso del mundo. El óxido nitroso es 300 veces más potente como gas de cambio climático que el dióxido de carbono. Ser vegano reduce tu huella de nitrógeno.
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Un porcentaje enorme de las selvas tropicales del mundo han sido taladas para cultivar la soya que se utiliza para alimentar a los animales de granja. Si simplemente comiéramos la soya y otros alimentos vegetales nosotros mismos, en lugar de dárselos primero a los animales de granja, no necesitaríamos cultivar tantas cosechas.
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Se necesita más de 11 veces la cantidad de combustible fósil para producir 1 caloría de proteína animal de la que se necesita para producir 1 caloría de proteína vegetal. La producción de carne y de otros productos animales requiere una cantidad enorme de energía —de modo que al volverte vegano ayudarás a detener el cambio climático.
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